Hace poco di por finalizada una
hermosa etapa de mi vida, en la que tuve el honor de ser parte del movimiento
Primero Justicia. Una organización donde cumplí exitosamente, tres (03) objetivos
políticos que me había planteado en pro de la gente de los sectores populares.
Este artículo es testimonial. No es un artículo para promocionar. Es solo el registro de mi experiencia personal en una etapa de mi vida política. Consta de 4 partes:
- Las 3 primeras explican cuales fueron esos 3 grandes objetivos que cumplí en PJ, y narran como fue el lucha para alcanzarlos.
- La última parte relata las razones fundamentales de mi salida del partido. Sinceramente esta cuarta parte, fue escrita con la esperanza de que otros no repitan mis errores.
Este artículo es testimonial. No es un artículo para promocionar. Es solo el registro de mi experiencia personal en una etapa de mi vida política. Consta de 4 partes:
- Las 3 primeras explican cuales fueron esos 3 grandes objetivos que cumplí en PJ, y narran como fue el lucha para alcanzarlos.
- La última parte relata las razones fundamentales de mi salida del partido. Sinceramente esta cuarta parte, fue escrita con la esperanza de que otros no repitan mis errores.
Objetivo 1: "Despertar a los sectores
populares"
Una de las razones que impedían
a los sectores populares, votar por los partidos opositores, era la
inexistencia de líderes locales que asumieran la tarea de ser cara visible de
estas organizaciones. Para despertar a los barrios del letargo político en que
los sumergió Chávez, era necesario presentar a los sectores populares: una opción
creíble de liderazgo político opositor ¡con discurso propio y centrado en los
problemas reales de la gente! Así en ese marco de idea, yo asumí el reto de luchar
para liderar localmente al partido como Primero Justicia en Catia (Caracas).
La tarea no fue fácil. Cuando ingrese a PJ, era común escuchar voces críticas que decían: “Primero Justicia es un partido de sifrinitos y amanerados”. En Catia, apenas manifesté públicamente, que era militante de PJ, tuve que soportar chistes que me “mandaban a Chacao y cuestionaban mi masculinidad”. Esa era la opinión general del país, sobre PJ: “Gente rara y alejada de su realidad cotidiana”.
No contare en detalle como fue
que lo logramos. Pero tuve que sufrí bastante para ganar espacio interno en el
partido. En la calle, me enfoque (junto a otros brillantes líderes locales) en
la lucha social como bandera. Procure ser la cara visible y accesible del
partido en mis barrios, y asumí la dura tarea de ser voz de la gente, pese a
las amenazas y comunes golpizas que siempre han acompañado mi lucha pacifica
contra el oficialismo radical.
Los frutos de esa lucha,
Venezuela los conoce. Ahora la gente considera a Primero Justicia, un partido más
de pueblo. Esa lucha me llena de profunda satisfacción.
Pero despertar a los sectores
populares, no significaba solo llamar su atención. Había que ganar la confianza. “Ok, tu eres un político verdaderamente de barrio, pero a
ti no te va a parar la élite del partido” me decían. Había que demostrar que
los sectores populares son protagonistas, y no simples rellenos de la política opositora
nacional.
Objetivo 2: "Demostrar que los sectores
populares son protagonistas de primer orden"
Para que demostrar que los políticos
de los sectores populares podíamos asumir un rol protagónico: Me embarque con otros
líderes populares, en la tarea de explicar al país, que los temas de los barrios “debían
recibir mayor importancia”.
Esta lucha no fue sencilla. Créanme que no fue fácil explicar a las élites políticas opositoras de aquel momento, cosas como mi participación en consejos comunales y comunas, o mi insistencia en poner primero la lucha social por encima de los objetivos proselitistas del partido. Afortunadamente, dentro de PJ, el hermano Henrique Capriles si entendió las razones políticas de ese enfoque en lo social. Por esa razón (protegido por el discurso y la acción de Capriles), los políticos como yo pasamos de ser “bichos raros" o “potenciales chavistas infiltrados en la oposición” a ser considerados luchadores sociales al mejor estilo de Capriles, con un mensaje y acción social fundamentales para el impulsar el proceso de cambios que queremos para el país.
Esta lucha no fue sencilla. Créanme que no fue fácil explicar a las élites políticas opositoras de aquel momento, cosas como mi participación en consejos comunales y comunas, o mi insistencia en poner primero la lucha social por encima de los objetivos proselitistas del partido. Afortunadamente, dentro de PJ, el hermano Henrique Capriles si entendió las razones políticas de ese enfoque en lo social. Por esa razón (protegido por el discurso y la acción de Capriles), los políticos como yo pasamos de ser “bichos raros" o “potenciales chavistas infiltrados en la oposición” a ser considerados luchadores sociales al mejor estilo de Capriles, con un mensaje y acción social fundamentales para el impulsar el proceso de cambios que queremos para el país.
Esta etapa tuvo ademas, otra faceta bien amarga: "Explicar a la sobreviviente clase media del país, que debía cambiar ciertos
mensajes que resultaban ofensivos para la gente de los sectores populares".
Algunos me llamaron clasista, resentido (y mil insultos mas), pero al final pude establecer semejanzas y
diferencias enriquecedoras, que permitieron a la clase media venezolana ver con
mejores ojos a los liderazgos de los barrios, y entender que los sectores populares no solo son protagonistas, sino protagonistas
de primer orden de la política nacional.
Ya con la atención y confianza de los sectores
populares, nos lanzamos a la conquista de “la colina más alta”. El nuevo
objetivo claro era: “Ganar una elección en Catia, para demostrarle al país, que el
oficialismo no era invencible en los barrios”.
Objetivo 3: "Ganar electoralmente Catia: La colina más
alta"
Durante varias elecciones intentamos ganarle
a la “maquinaria de electoral del PSUV" en Catia, y
siempre fuimos derrotados de forma aplastante. Mientras la oposición en otros municipios de Caracas celebraba triunfos, en Libertador señalaban al liderazgo de
Catia como causa del fracaso en todo el municipio. Me tocó oír burlas y hasta
insultos de políticos opositores de otras parroquias y municipios, que
aseguraban que los políticos de Catia no hacíamos ni servíamos para
nada.
Para ganar los barrios de Catia y 23 de enero, necesitábamos apoyo de los medios de comunicación. Ese apoyo tuvimos que buscarlo por cuenta propia, porque (incluso dentro de mi propio partido) un
sector del liderazgo opositor nos veía como "una amenaza a sus controles políticos o proyectos políticos personales", debido a que nosotros nos negábamos a ser borregos de algún jefe político.
Si un jefe del partido necesitaba militantes que le hicieran bulto en una rueda de prensa en otro municipio o parroquia, sabia que ¡no podía contar con nosotros!, porque explicábamos con firmeza “tener ocupaciones políticas más importantes en Catia". Por tanto, (como no eramos manejables) se consideraba un riesgo darnos voz en los medios de comunicación.
Así, con la falta de apoyo mediático, nos vimos obligados a buscarlo por cuenta propia. ¡Y lo logramos!. Poco a poco, los medios de comunicación del país (y del mundo) descubrieron que en Catia existían unos “locos” haciéndole una suerte de guerrilla pacifica urbana a los colectivos armados del PSUV.
Si un jefe del partido necesitaba militantes que le hicieran bulto en una rueda de prensa en otro municipio o parroquia, sabia que ¡no podía contar con nosotros!, porque explicábamos con firmeza “tener ocupaciones políticas más importantes en Catia". Por tanto, (como no eramos manejables) se consideraba un riesgo darnos voz en los medios de comunicación.
Así, con la falta de apoyo mediático, nos vimos obligados a buscarlo por cuenta propia. ¡Y lo logramos!. Poco a poco, los medios de comunicación del país (y del mundo) descubrieron que en Catia existían unos “locos” haciéndole una suerte de guerrilla pacifica urbana a los colectivos armados del PSUV.
Con lo mediático en mano, también pudimos ayudar a mucha
gente, a través de donaciones y aportes desinteresados, logramos resolver
problemas que ni un concejal o diputado podían. Ayudábamos a los ciudadanos sin
usar una camisa del partido, y sin rendir cuentas a élite alguna. Ayudábamos a los ciudadanos para demostrar autentica solidaridad, y eso se nos criticaba como falta de sapiencia política.
De esta etapa me quedaron, mil anécdotas difíciles. Pocos
saben la cantidad de veces que llore de rabia, luego de recibir una paliza por
repartir un volante. Pocos amigos saben que recibí humillaciones en la calle
por ser el “maldito escuálido del twitter”. Pocos saben que gente enferma, me
llamaba al teléfono para amenazar a mi hija y esposa. Pocos saben que en mi
comunidad había 10 colectivos armados. Pocos saben que hasta me llegue a orinar del
miedo, defendiendo a compañeros de ataques de motorizados armados.
Pero también me quedaron vivencias bonitas. Cuando
la dirección nacional de PJ me encomendó la tarea de liderar al partido en una elección
primaria, ¡le puse un mundo!. Renuncie a mi empleo para dedicarme tiempo completo
a la campaña. No tenia ni para comer, pero me metí en donde ningún político opositor se atrevería. Por mi osadía, recibí mas paliza (jajaja), casi me matan por negarme a "cumplir la ley de territorios de los colectivos armados".
Por desgracia, a pesar de a mi esfuerzo y el sacrificio de muchos, perdí la primaria "por falta de apoyo de un sector local del partido (que prefirió apoyar a los otros candidatos, para no perder el control local del partido). No obstante, abrí el camino a los candidatos a dedo. Mi trabajo, garantizó que la candidatura a dedo que me sustituyó, fuera para PJ, y no para otro partido. Así, capitalizando el malestar del pueblo contra la crisis económica, finalmente logramos ganar CATIA, y un glorioso 6 de diciembre de 2015, clavamos nuestra bandera de victoria en lo alto de "la colina mas alta de chavismo en América".
Por desgracia, a pesar de a mi esfuerzo y el sacrificio de muchos, perdí la primaria "por falta de apoyo de un sector local del partido (que prefirió apoyar a los otros candidatos, para no perder el control local del partido). No obstante, abrí el camino a los candidatos a dedo. Mi trabajo, garantizó que la candidatura a dedo que me sustituyó, fuera para PJ, y no para otro partido. Así, capitalizando el malestar del pueblo contra la crisis económica, finalmente logramos ganar CATIA, y un glorioso 6 de diciembre de 2015, clavamos nuestra bandera de victoria en lo alto de "la colina mas alta de chavismo en América".
Como ven… Mi balance en Primero Justicia es bien
positivo. Yo no puedo hablar mal de una organización que aprecio bastante. Nada mas hubiese querido que quedarme en sus filas, pero hoy
no están las condiciones dadas para que yo siga en PJ.
Razones de mí salida de PJ
Hasta ahora solo he hablado “flores”
de PJ. Pero la política real tiene su cara bonita, y su cara fea. Un político debe
aprender a sobrellevar la cara fea de la política interna de un partido. Debe
dar la lucha. Y yo la di, hasta donde fue lógicamente posible.
En lo interno del partido PJ
Caracas, hay 2 grandes grupos regionales de poder. En la actualidad, el grupo mayor busca la supremacía absoluta en la dirección de PJ Caracas, y por esa razón, desde noviembre de 2016, ha estado destituyendo arbitrariamente a sus rivales de todos los cargos políticos regionales y parroquiales importantes. Estas destituciones, naturalmente generan un profundo malestar interno en la organización, puesto que poco a
poco, cada cargo de responsabilidad del partido en PJ Caracas, ha ido pasando a
manos de algún miembro de la "Cofradía de amigos" que busca la hegemonía.
Mientras estuve en PJ, entendí que debía mantener buenas relaciones con los miembros de esta "Cofradía", y con sus rivales, los miembros del equipo "PJ Metropolitano". Pero en las elecciones primarias 2015, donde sorpresivamente la dirección nacional me nombró precandidato del circuito 1 de Libertador ¡pasando por encima de las aspiraciones del jefe local de la cofradía en Catia!, sin querer la dirección nacional me metió en un gran problema político.
Molesto por la decisión de la dirección nacional del partido, el jefe local de la cofradía en Catia (a quien yo pendejamente consideraba uno de mis mejores amigos) declaró una huelga de brazos caídos contra mi candidatura, y se alió "secretamente" (media Catia lo supo) con los candidatos rivales para evitar el ascenso de quien amenazaba su poder local: "yo". De manera que con dicha rebelión interna, tuve que recurrir a mis mas sinceros amigos independientes y al equipo "PJ Metropolitano", para desarrollar la campaña electoral de la primaria 2015. Hecho esto, inmediatamente mi "ex-jefe político y amigo del alma en Catia", denunció que yo trabajaba con el grupo "enemigo" (PJ Metropolitano).
Dudo mucho que la dirección nacional se haya enterado de esta lamentable situación interna. Quiero destacar que, de parte de la dirección Nacional del partido, recibí todo el apoyo posible, y les estoy muy agradecido. Por eso, estuve dispuesto hasta dar la vida, para ganar. Por eso, renuncie a mi empleo, para tener mas tiempo de campaña. Por eso, busque recursos bajo las piedras para la campaña. Y por eso, ¡Con gran esfuerzo!, logre que la mayoría de los dirigentes locales de PJ Catia, se sumaran a la campaña. ¡Pero mi esfuerzo no fue suficiente!
Como estaba previsto, por lógico miedo a una nueva lista Tascón, la gente no salio a votar en aquella Primaria 2015. Pudimos ganar, pero la traición y la corrupción interna de la cofradía acabo con esa posibilidad. El propio día de las primarias, con sumo detalles fui informado "Centro de votación por centro de votación", como la mayoría de los compañeros de la "cofradía en Catia" (por los que durante muchas elecciones arriesgue la vida para ayudarlos afianzar un poder político local), ¡pese a mis ruegos!: habían buscado votos para los candidatos rivales, y ¡habían hecho fiesta con los reales asignados para la logística de cada centro de votación!.
Mientras estuve en PJ, entendí que debía mantener buenas relaciones con los miembros de esta "Cofradía", y con sus rivales, los miembros del equipo "PJ Metropolitano". Pero en las elecciones primarias 2015, donde sorpresivamente la dirección nacional me nombró precandidato del circuito 1 de Libertador ¡pasando por encima de las aspiraciones del jefe local de la cofradía en Catia!, sin querer la dirección nacional me metió en un gran problema político.
Molesto por la decisión de la dirección nacional del partido, el jefe local de la cofradía en Catia (a quien yo pendejamente consideraba uno de mis mejores amigos) declaró una huelga de brazos caídos contra mi candidatura, y se alió "secretamente" (media Catia lo supo) con los candidatos rivales para evitar el ascenso de quien amenazaba su poder local: "yo". De manera que con dicha rebelión interna, tuve que recurrir a mis mas sinceros amigos independientes y al equipo "PJ Metropolitano", para desarrollar la campaña electoral de la primaria 2015. Hecho esto, inmediatamente mi "ex-jefe político y amigo del alma en Catia", denunció que yo trabajaba con el grupo "enemigo" (PJ Metropolitano).
Dudo mucho que la dirección nacional se haya enterado de esta lamentable situación interna. Quiero destacar que, de parte de la dirección Nacional del partido, recibí todo el apoyo posible, y les estoy muy agradecido. Por eso, estuve dispuesto hasta dar la vida, para ganar. Por eso, renuncie a mi empleo, para tener mas tiempo de campaña. Por eso, busque recursos bajo las piedras para la campaña. Y por eso, ¡Con gran esfuerzo!, logre que la mayoría de los dirigentes locales de PJ Catia, se sumaran a la campaña. ¡Pero mi esfuerzo no fue suficiente!
Como estaba previsto, por lógico miedo a una nueva lista Tascón, la gente no salio a votar en aquella Primaria 2015. Pudimos ganar, pero la traición y la corrupción interna de la cofradía acabo con esa posibilidad. El propio día de las primarias, con sumo detalles fui informado "Centro de votación por centro de votación", como la mayoría de los compañeros de la "cofradía en Catia" (por los que durante muchas elecciones arriesgue la vida para ayudarlos afianzar un poder político local), ¡pese a mis ruegos!: habían buscado votos para los candidatos rivales, y ¡habían hecho fiesta con los reales asignados para la logística de cada centro de votación!.
Luego de estos graves hechos, exigí a la directiva regional Caracas, sanciones internas para los involucrados en estas faltas graves. Increíblemente no fui escuchado, y dado que el jefe local que instigó estas faltas graves es también parte del Comité operativo del partido en Libertador, en vez de ser sancionando ¡fue premiado!. Y la cofradía poco a poco, inicio un pase de factura contra todo aquel dirigente que estuviera relacionado conmigo.
Quiero dar testimonio de cosas tan absurdas como:
- Que no se me permitió ¡ni siquiera ocupar responsabilidades relevantes de campaña del 6D!, porque supuestamente yo representaba "un problema político para los justicieros que apoyaron al candidato de VP y el de AD";
- Se me exigió trabajar solo en mi vecindad (como zonal) a las ordenes del jefe de la cofradía local para el que yo exigía sanciones.
Naturalmente yo proteste semejantes insultos, pero pedí a todos mis seguidores apoyar ¡de corazón al partido!, porque entendía que debía pensar en los objetivos de colectivos, en vez de los individuales. Por esa causa, para no crear problemas al partido, guarde silencio y postergue la presentación de mis denuncias.
- Que no se me permitió ¡ni siquiera ocupar responsabilidades relevantes de campaña del 6D!, porque supuestamente yo representaba "un problema político para los justicieros que apoyaron al candidato de VP y el de AD";
- Se me exigió trabajar solo en mi vecindad (como zonal) a las ordenes del jefe de la cofradía local para el que yo exigía sanciones.
Naturalmente yo proteste semejantes insultos, pero pedí a todos mis seguidores apoyar ¡de corazón al partido!, porque entendía que debía pensar en los objetivos de colectivos, en vez de los individuales. Por esa causa, para no crear problemas al partido, guarde silencio y postergue la presentación de mis denuncias.
- Señale que la Constitución nacional protege a los electos por voto popular.
- Que nuestra elección como directivos había sido avalada por el CNE.
- Que los reglamentos del partido estaban siendo violados...
...y la respuesta básica a mi queja fue que ¡la vaina era a lo arrecho!.
Me dijeron exactamente: "La destitución es una decisión tomada. Aquí no vale la Constitución nacional, sino los estatutos del partido. Si no te gusta, te puedes ir. Te falta disciplina y compromiso con el partido. Tu trabajo no puede ser por Catia, sino por El-Par-Ti-DO. Nosotros no expulsamos a nadie. Tu no necesitas un cargo. Si demuestras trabajo, te tomaremos en cuenta en el futuro. Y si vas a quejarte con la directiva nacional o los medios, eso es una amenaza".
En la siguiente reunión local, la nueva autoridad impuesta (que no había asumido cargo por no tener tiempo) asumió a la carrera. Yo como buen, "perro fiel", me le puse a la orden, y comente a los presentes que estaba haciendo un reclamo. Por ese comentario, me llamaron la atención agriamente, pues hablar del caso ante mis compañeros eran un saboteo a la autoridad.
Yo respire profundo y pensé: "No es lógico que quienes nos ganamos un espacio político (gracias a años de lucha), de un día a otro lo perdiéramos por una decisión de oficina, debido a que no le caemos bien al club de tecnócratas y capataces de nomina de la cofradía de Caracas". Converse con otros inconformes con estas destituciones de directivas electas, y todos pensamos que: "la destitución de cargos, degradación, o reducción de nuestros espacios ganados, igual que en una empresa, es señal de despido indirecto"; por lo tanto (y como es lógico) entendimos que indirectamente habíamos sido expulsados del partido.
Alguien puede argumentar que no
he sido oficialmente expulsado. Pero ustedes saben que no necesitan pasarle una
carta notariada a un perro, para que el entienda que lo están corriendo.
Ustedes se van a reír, pero a pesar de todos estos desmanes, yo insistí en permanecer en el partido ¡dando la lucha interna!, y me dispuse a ser un simple militante más. Pero apenas comencé, se me censuró por invitar a actividades sin autorización de los funcionarios de la cofradía. Se me acusó nuevamente de falta de disciplina. Y termine hasta excluido de un simple grupo de whatsapp, donde aparentemente también mi presencia representaba un problema.
Ustedes se van a reír, pero a pesar de todos estos desmanes, yo insistí en permanecer en el partido ¡dando la lucha interna!, y me dispuse a ser un simple militante más. Pero apenas comencé, se me censuró por invitar a actividades sin autorización de los funcionarios de la cofradía. Se me acusó nuevamente de falta de disciplina. Y termine hasta excluido de un simple grupo de whatsapp, donde aparentemente también mi presencia representaba un problema.
En
consecuencia, visto que fuimos degradados y nuestros espacios políticos
'ganados con la lucha de años', fueron desaparecidos vía decreto... ¡y que ni siquiera podíamos hablar o ser parte de grupo de whatsapp!… Yo decidí
entender el mensaje claro de la cofradía, y tomar otro rumbo.
…
Mi partida de PJ, es profundamente
triste para mi y los míos, pero es una medida lógica y necesaria, porque (aunque
hoy se resolvieran en los diferentes diferendo internos en la regional Caracas),
ya no están dadas las condiciones para permanecer y desarrollar un trabajo
sincero de equipo, pues la cofradía regional mandante, nos miran con
desconfianza por reclamar y desafiar su autoridad. Nuestras ignoradas quejas,
privadas y discretas, han generado la animadversión del equipo Regional
Caracas, y por tanto el ambiente es hostil contra nosotros y todo el que se nos
junte. La sola mención de algún amigo, causa que sea vigilado como posible
enemigo, y así se lo manifiestan a todos aquellos que mantienen amistad con
este “leproso”.
Quiero mencionar también, que en mi decisión final de romper con el partido, cobró gran importancia el horror que me causó el trato cruel y despiadado que recibió una gran amiga militante justiciera de Catia "cuyo esposo fue encarcelado por el SEBIN, por usar su empresa de publicidad para apoyar campañas opositoras en Caracas". Preso el muchacho y perseguida la muchacha, todos los dirigentes regionales del partido, le dieron las espaldas a las victimas. La dirigencia amarilla se hizo eco de los cuentos del SEBIN (que aseguran que el chamo es un delincuente)... Ver ese horror me hizo preguntarme: ¿Que clase de personas actúan así con su propia militancia?. Yo le di el beneficio de la duda a las victimas, y luego de revisar varios expedientes que el SEBIN invento para justificar sus atropellos, salí a defender a esta pareja de dirigentes comunitarios, y por eso me gane un mayor desprecio de la cofradía, que se niega a reconocer que se equivocó horrorosamente.
Quiero mencionar también, que en mi decisión final de romper con el partido, cobró gran importancia el horror que me causó el trato cruel y despiadado que recibió una gran amiga militante justiciera de Catia "cuyo esposo fue encarcelado por el SEBIN, por usar su empresa de publicidad para apoyar campañas opositoras en Caracas". Preso el muchacho y perseguida la muchacha, todos los dirigentes regionales del partido, le dieron las espaldas a las victimas. La dirigencia amarilla se hizo eco de los cuentos del SEBIN (que aseguran que el chamo es un delincuente)... Ver ese horror me hizo preguntarme: ¿Que clase de personas actúan así con su propia militancia?. Yo le di el beneficio de la duda a las victimas, y luego de revisar varios expedientes que el SEBIN invento para justificar sus atropellos, salí a defender a esta pareja de dirigentes comunitarios, y por eso me gane un mayor desprecio de la cofradía, que se niega a reconocer que se equivocó horrorosamente.
Como ven, aunque la directiva nacional me hubiera ayudado (como quisieron hacerlo varios amigos y dirigentes), mi presencia en el equipo de Caracas era incómoda e insostenible. Intente (como solución) integrarme al equipo político de PJ Chacao, pero Chacao no
es mi espacio natural. Intenté buscar otro espacio, una vocería metropolitana o nacional. Hable para
ofrecerme a trabajar políticamente con gente que admiro mucho, como Tomás
Guanipa, JM Olivares, Dinorah, (incluso le hable a Capriles, quien nos recibió
y atendió 2 horas), pero no concrete ese espacio alternativo donde poder aportar
positivamente al partido. Las posibilidades se me agotaron, y fin de la
historia.
Yo me fui a la 'No militancia', con un gran aprendizaje en política bonita y política
fea. Me voy muy feliz porque conocí a gente brillante como Capriles, Tomas,
Ocariz, Ferrer, Dinorah, JM Olivares, Fincheltub, y la lista es gigantesca. Tengo
amigos en PJ por todo el país. Para ellos son estas humildes líneas.
¡Amigos!!!
Gracias por todo.
6 comentarios:
Hermano aquí esta jibaro37 dándole respaldo y entendiendo q al igual q yo...somos soñadores de una manera de hacer política q no es común en vzla...solo personajes admirables como ud. capriles .ocariz . j m olivares etc. Viven pensando en el pueblo... Creo q en primero justicia de cual soy un simple aficionado se esta perdiendo el norte por la llegada de laa pirañas
Saverio también eres admirable,felicidades por tus logros que lastima que ese grupo sea tan egoísta, no se trata de individuos se trata del país, hermano un abrazo saludos desde Barquisimeto
Hermano recibe mi saludo desde el Estado Portuguesa, en todas partes hay gente buena y hay gente mala, pero ya verás caer al malvado porque Dios hará justicia. Paciencia, sé que el mismo pueblo pedirá que regreses. Un abrazo!
Vente pa Ad aquí serias súper útil
Vente pa Ad aquí serias súper útil
Ese grupito que ud llama la cofradía, actua igual a como ud actuó antes los hechos del 2014. Con mucha indiferencia antes el sufrimiento del projimo Y por eso tengo profundas diferencias con ud, a pesar q por mi parte si condené cuando lo agredieron en su campaña de las primarias. No vendria mal hacer un autoanalisis y pedir disculpas por eso. Ah y no tengo militancia en partido alguno pq como dicen sus amigos "no tengo la disciplina" pero si consciencia ciudadana. Feliz dia.
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